Arantza Saez de Okariz es una de esas personas con las que te gusta encontrarte en la vida. Antepone las soluciones a los problemas, con positivismo, energía y, siempre, una enorme sonrisa. Será que es feliz… Y en eso, nos cuenta, tiene mucho que ver la creatividad que mantiene siempre presente y consciente en su vida. La coordinadora de initland BBF y una de las responsables de capacitación en creatividad de initland, nos cuenta la importancia de esta inherente cualidad del ser humano para la innovación y el crecimiento en las empresas.
¿Cuál es tu definición de creatividad?
Crear donde antes no había.
La creatividad está asociada a un porcentaje altísimo de lo que hacemos en el día a día
Cuéntanos tu historia, asociada a la creatividad.
Mi trayectoria profesional ha estado siempre muy ligada a la formación. Prácticamente en todas las empresas en las que he trabajado, he desarrollado tareas relacionadas con formación y en todas ha estado presente la creatividad. No solo la que es importante poner en juego para planificar las sesiones; también en el propio desarrollo de las mismas es interesante apelar a la creatividad de las personas para facilitar su proceso de aprendizaje.
Creo que la creatividad es intrínseca a casi todo. En mi papel en initland, utilizo la creatividad para mi trabajo diario: coordinar initland BBF, organizar la disposición del centro, preparar dinámicas para la comunidad, presentarlas de forma atractiva, impulsar nuevas ideas… La creatividad está asociada a un porcentaje altísimo de lo que hacemos en el día a día.
Como concepto, no ha estado asociado siempre al mundo empresa
Desde mi experiencia, depende del tipo de empresa, porque hace ya unos años que sí se habla de creatividad en el mundo de las grandes organizaciones. Sí es cierto que esa creatividad se limitaba a brainstormings; nos quedábamos ahí. Ahora ha evolucionado y existen más dinámicas, más instrumentos para que esa creatividad inherente a todas las empresas, se pueda llevar a la práctica. Que pueda dar resultados interesantes. La sociedad va cambiando, y las empresas necesitan estar a la altura de las demandas de la sociedad para poder ser competitivas
¿Qué aporta la creatividad en una empresa?
En primer lugar aporta un cambio en la manera de ver las cosas. Facilita a las personas percibir que hay otra forma de mirar. Y salir de nuestra manera habitual de pensar amplía nuestro campo de visión. ¿Sabes las anteojeras que llevan los caballos para no ver más allá de lo que tienen delante? La creatividad nos ayuda a quitarlas y darnos cuenta de que hay más escenario; de que podemos hacer las cosas de otra manera. Esto abre una puerta a que aparezca la innovación.
¿Percibís este cambio de visión en las organizaciones con las que trabajáis?
Esa capacidad de asombro se ve por ejemplo cuando facilitamos una partida de Binnakle, que es el primer juego que fomenta la innovación en las empresas. Cuando termina todo el proceso y preguntamos – ¿qué impresión te llevas? – todo son asombros. No pensaban que a través de un juego se puede lograr tanto.
También en las formaciones vemos caras de asombro, porque a través de herramientas muy sencillas, aplicables en el día a día, resolvemos grandes retos. Por ejemplo, facilitamos la puesta en marcha del proceso creativo a través de un ejercicio tan sencillo como describir un objeto cualquiera, como un bolígrafo, y luego aplicar esas características a nuestro reto o pregunta. En el día a día, a veces complicamos lo sencillo.
Buscamos que se establezcan en las organizaciones estructuras internas que favorezcan y sostengan la creatividad personal y colectiva
¿Cómo se estructuran estas formaciones?
Dentro de los servicios de initland en consultoría en innovación para grandes organizaciones, tenemos un bullet, o píldora formativa, de creatividad en el trabajo para el fomento del intraemprendimiento. Por intraemprendimiento entendemos el desarrollo de nuevas ideas y mejoras en los productos y servicios de nuestras empresas.
En este bullet de creatividad, trabajamos por lado la creatividad individual y por otro la colectiva. En el apartado de creatividad individual trabajamos por ejemplo el pensamiento lateral, con metodologías como los 6 sombreros de Bono. El pensamiento lateral, en contraposición al pensamiento racional o lógico, provoca salir de lo establecido: think outside the box. Para la creatividad colectiva, utilizamos herramientas relacionadas con procesos de innovación abierta, como open space o metaplan.
Lo más importante es que no se trata de un bullet teórico. Tiene fundamentos de teoría, pero es práctico y vivencial. Las personas se llevan esa experiencia; viven en ese momento el proceso creativo. Esto es fundamental para poder echar mano de esas herramientas en el futuro de forma autónoma. Lo que buscamos en initland es que se establezcan en las organizaciones estructuras internas que favorezcan y sostengan la creatividad personal y colectiva; que entendemos fundamental para intraemprender.
¿Qué es el Aspersor?
Hemos creado en initland un grupo de creatividad, el Aspersor, del que formamos parte el director, Carlos Piñeyroa, mi compañera Adriana de initland Zaragoza y yo. Nos reunimos una vez al mes, leemos, nos documentamos, generamos conocimiento, e incluso queremos crear herramientas propias.
Ya hemos creado una micro herramienta que tiene que ver con las emociones y la creatividad. Se trata de un instrumento que ayuda a darnos cuenta de qué manera afectan las emociones en nuestro proceso creativo. ¿Qué emociones dirías que provocan más la creatividad, las positivas o la negativas? Depende. No tiene que ver tanto con esta característica, sino con la intensidad de la emoción. En los talleres, lo aplicamos como un ejercicio práctico para que las personas sean conscientes de qué emoción ha suscitado su creatividad en un determinado momento.
Poner en marcha nuestra capacidad creativa nos aporta felicidad
¿Todas las personas somos creativas?
Todas en mayor o menor medida y, como estamos viendo, también esa creatividad innata se puede desarrollar.
Es curioso que si preguntamos ¿quién se considera creativo o creativa?, pocas personas levantan la mano. Mucha gente piensa que no lo es. Y sin embargo, a lo largo de los talleres y tras diferentes herramientas y dinámicas, finalizan dándose cuenta de que sí lo son. Eso es lo bonito: que cada persona reconoce su propia capacidad creativa.
¿Qué supone esta creatividad en el terreno personal?
En mi opinión, poner en marcha nuestra capacidad creativa nos aporta felicidad. Asocio el proceso creativo a algo agradable. Bien porque estamos solucionando un problema, lo que nos satisface enormemente, o por el simple hecho de crear y aportar algo bello al mundo, lo que en sí mismo es maravilloso. Somos personas creativas por naturaleza. Beethoven, Miguel Ángel… las mayores obras de de la historia han surgido por el simple placer de crear.
¿Cómo vive la creatividad Arantza Saez de Okariz?
Procuro tenerla presente constantemente y llevarla a la práctica en todo lo que hago, como por ejemplo cuando cocino, que me encanta. La mayoría de las personas lo hacemos inconscientemente. Yo, de manera consciente digo: “hoy voy a innovar”. La creatividad es inherente a nuestro ADN; está en nuestra esencia y por eso cuando decidimos llevarla a la práctica nos sentimos realmente bien. De ahí que sea tan importante para nuestra felicidad.