Sabes que innovar es esencial para diferenciarte de tus competidores y garantizar el futuro de tu empresa. Pero ¿sabes cómo hacerlo?
La innovación es tan particular como tu propia visión de negocio, pero queremos compartir contigo nuestras 7 claves para que las nuevas ideas en tus productos y servicios no dependan de las musas.
1. Sistemática
Tener grandes ideas en la ducha o durante una sesión de running es fabuloso, pero para asegurarnos de que llegan a buen puerto y no depender únicamente de la inspiración espontánea, es importante sistematizar el proceso de innovación en la empresa como cualquier otro: financiero, ventas, marketing, comunicación o dirección.
Esto permite que el flujo de innovación sea permanente y continuado, que las buenas ideas no se queden en papel mojado y, sobre todo, que la innovación sea transversal al resto de personas, equipos de trabajo y áreas de la compañía.
2. Rentable
¿Una obviedad? Cuántas veces nos dejamos llevar por impulsos creativos sin dimensionar todo el contexto. La creatividad abre las puertas de la innovación, pero también es esencial bajar las ideas a tierra y comprobar que están dentro de nuestras líneas estratégicas de negocio, que podemos ejecutarlas de forma efectiva y que en el futuro se traducirán en mayor rentabilidad.
3. Diferenciadora
Fijarse en la competencia no solo no es pecado, sino que además es necesario para conocer el terreno en el que nos movemos. Sin embargo, si nuestros esfuerzos se centran únicamente en copiar a los mejores, nosotros nunca llegaremos a serlo.
Enfoca tu inversión en innovación en tu propuesta de valor diferenciadora. Es el mejor camino para aportar a tus clientes algo único entre la competencia.
4. Multidisciplinar
¿Conoces la expresión “no tener todos los huevos en la misma cesta”? Si te es posible, abarca diferentes áreas o disciplinas. De esta forma, el riesgo inherente a la innovación queda repartido.
Además, los entornos monocolor tienen mayor competencia y es más difícil diferenciarte. La diversidad da juego y multiplica las posibilidades, más en el campo de la innovación.
5. Compartida
Para que la innovación fluya adecuadamente en una empresa, es fundamental que todas las personas y departamentos estemos implicados. Si el equipo técnico es un gran generador de nuevas ideas pero no es apoyado por dirección, o viceversa, los nuevos proyectos no verán la luz.
Cada uno somos especialistas en nuestra área, y especialmente ahí podemos aportar y ejercer la responsabilidad de innovar cada día. Pero además, es esencial contar con un proceso transversal que engrase todo el proceso y una a los departamentos. Los equipos de trabajo transversales son altamente efectivos para innovar con la experiencia de todas las áreas implicadas.
Es fundamental también contar con los mejores partners y compañeros de viaje. Nadie sabemos hacer de todo y bien, por lo que identificada nuestra propuesta de valor diferenciadora, debemos buscar los mejores aliados estratégicos para ofrecer soluciones globales a nuestros clientes.
6. Generosa
Vivimos en la era digital donde ya no hay barreras. Así que en lugar de seguir escondiendo bajo 13 llaves nuestro mágico secreto empresarial, que seguramente no lo es tanto, podemos compartir nuestro conocimientos y avances en innovación.
¿Por qué? Porque aunque a veces nos cueste entenderlo, la generosidad se premia. Y si compartimos nuestras ideas, es muy posible que nos ayuden a completarlas y mejorarlas con puntos de vista que no habíamos contemplado. Además, nuestros clientes, usuarios y seguidores, desde hace tiempo prosumidores, diferencian a la legua la información de valor del autobombo, y si la ponemos en sus manos, la difundirán como los mejores embajadores de marca.
7. Sostenible
Innovar no es dar un pelotazo y echarte a descansar. Si tienes una profunda visión de tu negocio, valoras a tus trabajadores y colaboradores y te preocupa el impacto social de tu compañía, deberías contemplar la innovación desde un punto de vista sostenible en lo económico, social y medioambiental.
De hecho la innovación es uno de los ejes fundamentales sobre los que gira el futuro sostenible de tu empresa. Como aprendimos en la última edición de Innova Bilbao, en los próximos 10 años tendremos la misma cantidad de cambios que en los últimos 100.
¿Estás preparado para seguir el ritmo?